El pleno del Ayuntamiento de Gandia aprobó ayer, con la mayoría absoluta del PP, la abstención del Bloc y los votos en contra del GMS, eliminar el organismo autónomo de recaudación, el OGIR, para que sea la Diputación de Valencia el organismo que, a partir de ahora, realice la recaudación de impuestos y multas en Gandia.
La concejala del Grupo Municipal Socialista, Ana Garcia, fue la encargada de defender el voto contrario de su grupo, que justificó con el hecho de que el convenio con la Diputación presenta muchas dudas y, sobre todo, porque el gobierno “no explica ni garantiza qué va a pasar con los actuales trabajadores del OGIR ni si las familias con más problemas podrán acogerse, como hasta ahora, a planes especiales de pago”.
Respecto al segundo aspecto, Garcia explicó que en los últimos años, y con los problemas que ha ocasionado la crisis económica, el OGIR gestionó más de 1.600 planes personalizados para que familias y particulares con problemas económicos pudieran acogerse a unas condiciones de pago más flexibles y óptimas para sus bolsillos. Un hecho que el nuevo funcionamiento de la recaudación no garantiza y que, por eso, Garcia le preguntó al concejal de Economía, Guillermo Barber, si se continuarían tramitando estas demandas. Una pregunta que no recibió ninguna respuesta.
Tampoco se obtuvo una respuesta clara sobre el futuro de los trabajadores del OGIR de hoy en día, a los cuales Ana Garcia les agradeció “la buena y reconocida tarea que han realizado, con datos de recaudación muy elevados y un tratamiento personal a los ciudadanos exquisito”. Una tarea que la socialista lamentó que no se haya visto reconocida ahora “cuando han creado una angustia a los funcionarios por su futuro”.
En resumen, Ana Garcia explicó que, para los socialistas, este convenio presenta muchas dudas y pocas ventajas. Entre las primeras, Garcia asegura que no se especifica ni qué tributos se van a recaudar, ni qué le va a costar a Gandia ni por cuánto tiempo tendrá vigencia el convenio. Por la parte positiva, José Manuel Orengo, portavoz de los socialistas, aseguró que sólo aprecian el hecho de poder recibir dinero por anticipado. Por eso, Orengo calificó el acuerdo como un resultado de “Gandia 0 – Alfonso Rus 1”, en referencia al presidente de la Diputación de Valencia.
El PP de Torró y Soler justifica la violencia policial
La concejala del Grupo Municipal Socialista en el Ayuntamiento de Gandia, Diana Morant, defendió en el pleno una moción presentada por los socialistas y en la que pedían que Gandia condenara la actuación policial durante las cargas a manifestantes estudiantiles por los recortes de la Generalitat Valenciana en educación en lo que ya se conoce como el movimiento de la “Primavera Valenciana”.
La moción, que se debatió conjuntamente con una muy pareciendo presentada por el Bloc, estuvo rechazada por la mayoría absoluta del PP, que con su portavoz al frente, Víctor Soler, defendieron y justificaron la violencia policial, poniendo en entredicho la autonomía y las decisiones de los estudiantes.
El momento más lamentable de la actuación de Víctor Soler fue cuando el portavoz del gobierno sacó pecho por las políticas en materia de educación realizadas por el gobierno de su partido en la Generalitat. Soler se atrevió a negar los recortes y criticó las imágenes de los alumnos con mantas que incluso ha criticado el presidente Fabra.
El portavoz del gobierno llegó a calificar las manifestaciones de ilegales y, por tanto, dijo que quienes se estaban manifestando eran delincuentes.
Soler utilizó argumentos más propios de tertulianos “ultra” en cadenas de televisión como Intereconomía, mintiendo y diciendo que la Comunitat Valenciana, a pesar de estar en la cola en educación en España y en Europa, es la que más dinero invierte en este campo. Un argumento falso que trata de tapar lo que verdaderamente votó ayer el PP: la aprobación de la actuación policial bajo las órdenes de la Delegada del Gobierno, Paula Sánchez de León, quien, para mayor burla a la ciudadanía, visitará Gandia mañana para firmar en el libro de Honor.