El Grupo Municipal Socialista en el Ayuntamiento de Gandia ha preguntado hoy por escrito al gobierno de la ciudad por la situación en la que queda actualmente el servicio de recogida de animales abandonados en las calles de la ciudad, después de la polémica que han tenido esta semana los miembros del gobierno del PP con quien hasta ahora ha estado prestando este servicio, la sociedad protectora SPAMA de la Safor.
Así, los socialistas han presentado por registro de entrada una petición para acceder, por una parte, al convenio todavía en vigor que se firmó con SPAMA, y por otra, el contrato que se ha firmado ahora con la Sociedad Protectora Refugiocan de Benissanó. Los socialistas pretenden conocer los detalles de los dos documentos para analizar las diferencias económicas y de servicios que existen.
Y es que para el Grupo Socialista, según ha explicado su concejal y miembro de Els Verds, Joan Lluís Soler, existen muchas dudas alrededor de toda esta polémica. Así, Soler ha destacado, por ejemplo, que “si atendemos a los datos de los servicios prestados anualmente por SPAMA, la diferencia de precio no es tan grande como pretenden vender desde el gobierno del PP”.
A esta diferencia, además, el Grupo Socialista añade otro aspecto a tener en cuenta, y recuerda que cuando se firmó el convenio con SPAMA, se dio especial importancia al hecho de que la gestión corre a cargo de una ONG comprometida con los animales, por lo que se cuenta con unas instalaciones de calidad y se favorece la adopción de los animales recogidos antes que su sacrificio, como sí que hacen otras empresas que gestionan este servicio. Así, SPAMA cuenta con infraestructuras, recursos humanos y técnicos y un programa de gestión de adopción a nivel local, comarcal e incluso, internacional, que posibilitó que en 2011 se adoptaran 600 perros.
Por todo esto, Soler ha asegurado que sospechan que detrás de toda esta polémica “se esconde una intencionalidad del gobierno del PP, que ha presionado a SPAMA sin pagarles hasta que han dejado de prestar el servicio”. Así, los socialistas consideran que se trata de un nuevo ejemplo del bombero-pirómano del gobierno del PP: crean problemas donde no hay para después buscar una solución que beneficie a alguna persona afín.
Por último, Soler ha remarcado que, una vez más, Torró incumple con su palabra, y si en campaña electoral prometió que contrataría sólo a empresas locales, en este caso ha ahogado a una empresa local sin pagarle y ha contratado a otra de fuera.