El Grupo Municipal Socialista de Gandia ha aprovechado la visita que hizo ayer el presidente de la Generalitat Valenciana, Alberto Fabra, a la ciudad para recordarle al máximo mandatario de la Generalitat Valenciana que su administración todavía le debe a Gandia más de 600.000 euros de la restauración del Palau Ducal, una deuda que arrastra desde hace 10 años.
Precisamente Fabra estuvo acompañando a la presidenta de Madrid, Esperanza Aguirre, y al alcalde de Gandia, Arturo Torró, en la visita que los tres políticos hicieron en el histórico edificio gandiense. Por eso, los socialistas han lamentado que Fabra visitara Gandia sólo, y una vez más, para hacerse la foto y no para pagar.
Ya hace más de 100 días que el PP ha llegado al gobierno de Gandia y todavía no ha llegado ni un euro de la deuda que la Generalitat atesora con Gandia. Pero no sólo esto: el poco peso de Torró con las altas esferas de la Generalitat ha quedado patente con el hecho de que Gandia no haya conseguido arrancar ningún compromiso del Consell en cuestiones básicas y de futuro.
Así, los socialistas han recordado que ni se ha conseguido evitar la paralización del Hospital Comarcal, ni la reactivación del Palacio de Justicia, ni la reforma del colegio Sant Francesc de Borja ni la de otros colegios, ni que se mantenga el médico en Marxuquera.
Sin apoyo al corredor Mediterráneo desde “la playa de Madrid”
La visita de Esperanza Aguirre y Alberto Fabra a Gandia ayer dejó algunas perlas y, lo que es más grave, una incertidumbre de futuro para los valencianos, dado que la presidenta madrileña eludió apoyar el corredor Mediterráneo y aseguró que será Rajoy quien decida sobre el mismo.
De este modo, el PP se posiciona claramente en contra de las intenciones de la Unión Europea, que considera prioritario el corredor del Mediterráneo por delante del corredor Central, que es el que defienden Aguirre y Rajoy, poniendo en peligro esta importante infraestructura para los valencianos si el PP gana las elecciones el próximo 20N.
Ante todas estas posturas, Torró rindió homenaje al PP de Madrid asegurando que la playa de Gandia “es la playa de Madrid”, demostrando una vez más que su principal preocupación no es Gandia ni las reivindicaciones de los gandienses.