Empresas de Gandia vuelven a acoger estudiantes en prácticas del Laval dos años y medio después de la pandemia

El Saló Laval del Ayuntamiento de Gandia ha acogido esta mañana la recepción del alumnado de intercambio procedente del Lycée Professionnel Robert Bouran Laval que vuelven a participar, más de dos años y medio después del paro causado por la pandemia, en un programa Erasmus que renueva el compromiso de hermanamiento con nuestra ciudad para mejorar su formación profesional y de conocer y entender otras culturas que contribuyan a enriquecer su experiencia personal.

La concejala de Relaciones Internacionales, Liduvina Gil, acompañada por el representante de la asociación de panaderos y pasteleros de Gandia, Miguel Rosselló, ha dado la bienvenida esta mañana a Leïla Diallo, Karelle Zamaron, Maël Bellier y Hugo Pierre, los cuatro alumnos franceses de secundaria que pasarán un mes de estancia  en Gandia para realizar las prácticas en las mejores panaderies y pastelerías de la ciudad bajo la supervisión de su tutora y profesora del instituto galo, Bastian Gaelle.

Los establecimientos donde estos y estas jóvenes realizarán las prácticas profesionales son las pastelerías y panaderías Adri Dolç (Grau de Gandia), Pasta Pa y Pa d’Or Panadería (Roís de Corella), Pastissería Ramiro (República Argentina-Plaça E·llíptica) y Panadería Pasteleria Roselló del Centre Històric.

«Es realmente un placer porque esta pandemia ha impedido que nuestra juventud pudiera mejorar su formación a través de programas en otros países de Europa y del mundo», ha declarado Gil, quien ha destacado que gracias a este tipo de iniciativa el alumnado francés «tendrá una mejor formación integral y se enriquecerán profesionalmente con todos los dulces típicos de Navidad de Gandia y de nuestra comarca».

En sus intervenciones, Gaelle y el alumnado del Laval han agradecido en nombre del instituto la buena acogida y predisposición que muestran tanto el Ayuntamiento de Gandia como los empresarios para apostar y para dar continuidad a este proyecto.

Finalmente, Rosselló ha puesto en valor que gracias a esta iniciativa «el alumnado aprende de nosotros y nosotros también de ellos porque intercambiamos idioma, cultura y conocimientos».