Gandia, 1 de junio de 2016.-
La alcaldesa y la vicealcaldesa de Gandia, Diana Morant y Lorena Milvaques, respectivamente, acompañadas del coordinador de Economía y Hacienda, Salvador Gregori y la totalidad del Gobierno Local, han presentado esta mañana ante los medios de comunicación las líneas maestras del documento marco de trabajo de los Presupuestos Municipales de Gandia para 2016.
Antes, Morant ha hecho un relato del que ha sido el primer año de gobierno, un cambio hacia la decencia, la responsabilidad y la buena gestión económica. “Un nuevo gobierno llegaba a la ciudad y comenzaba las gestiones para que Gandia volviera al camino de la cordura y el sentido después de cuatro años de impagos, despilfarro y prometidas irreales que condenaron Gandia a una situación económica insostenible”.
Así, cuando los grupos de PSPV-PSOE y Més Gandia llegaron al gobierno un 13 de junio de 2015, Gandia tenía una deuda con entidades bancarias de 250 millones de euros, que suponía 136 millones de euros más que cuando entró a gobernar el PP. Además, había una deuda a proveedores de 54.822.000 millones de euros, facturas de trabajos encomendados a pesar de saber que no se disponían de dinero para poder hacerlos y pagarlos.
La situación en la empresa pública IPG era también dramática. Con una deuda a proveedores de 16,8 millones de euros, facturas a los cajones y una nómina de trabajadores que suponía 300.000 euros mensuales. Con este panorama, el nuevo gobierno de Gandia acudió a una cita con el Ministerio de Hacienda para tratar el Plan de Ajuste que le habían denegado al PP hasta en dos ocasiones. Un Plan de Ajuste necesario para que Gandia fuera una ciudad viable económicamente.
La Alcaldesa y la Vicealcaldessa de aquel nuevo gobierno, Diana Morant y Lorena Milvaques respectivamente, se trasladaron a Madrid. Fue allí donde Beteta, secretario de Estado de Administraciones Públicas pronunció una frase que describía a la perfección la situación en que el PP había dejado Gandia: “Ni subiendo todos los impuestos que se pueden subir, ni recortando todos los gastos que se pueden recortar, Gandia puede tener viabilidad económica”. Con esta situación, el gobierno trabajó de lo lindo con el Departamento de Economía y Hacienda, encabezado por su Interventor, que hasta ahora no había supervisado ninguno de las propuestas presentadas por Gandia para el Plan de Ajuste. “El PP iba por libre y sin tener en cuenta ninguna voz técnica ni especializada. Y así, tuvimos que tomar la decisión más complicada que puede tomar un político: subir los impuestos y recortar los gastos”. Para el nuevo gobierno se trata de una decisión impopular. “Pero el delicado momento que vive Gandia reclama de políticos valientes y responsables, que toman decisiones pensante en el que necesita su ciudad y no en aquello que le da o le quita votos”. Y así, además del Plan de Ajuste, trabajaron otros documentos con otras administraciones como el Plan Económico y Financiero (PEF) con la Generalitat Valenciana y volvimos a revisar el plan de ajuste.
“Pero este gobierno, que siempre ha dicho que la prioridad absoluta de su gestión son las personas, no iba a quedarse en la simple aprobación de una subida de impuestos”, y comenzó negociaciones con la Diputación de Valencia (de dónde es diputada la Alcaldesa de la ciudad), y con la Generalitat Valenciana, donde también hay un gobierno progresista “que sabe el que es sufrir una herencia de gestión de un gobierno malgastador del PP. Y conseguimos unos ingresos extraordinarios y unos ahorros que nos han permitido cuadrar los que, sin duda, son los presupuestos más difíciles de la historia de Gandia”. Así, cuando cumplimos el primer año de gestión, el gobierno presenta estos primeros presupuestos, de los cuales el edil socialista ha resaltado las siguientes calidades:
1.- Son unos presupuestos legales.
Los primeros después de dos presupuestos ilegales, el segundo de los cuales se prorrogó en 2015 ante la incapacidad del PP para aprobarlos a pesar de su mayoría absoluta. Son legales porque incluyen la obligatoriedad de pagar en los bancos aquello que se los debe de, “tal y como tiene que hacer cualquier familia con deudas financieras. Y una administración pública tiene que dar ejemplo y cumplir con sus obligaciones. La Gandia del PP, por desgracia, era ilegal e incumplidora, y rompió relaciones con entidades bancarias y proveedores”.
2.- Son unos presupuestos realistas.
No incluyen ingresos extraordinarios ni cánones inventados. “Nos ceñimos al que tenemos y no nos inventamos dinero para gastar en cosas innecesarias”. Si durante la legislatura el gobierno es capaz de conseguir nuevos ingresos con la venta de patrimonio o por otras vías, los utilizarán para reducir deuda “e intentar facilitar las cosas a los bolsillos de los y las gandianeses»
3.- Son unos presupuestos responsables, sin despilfarros, con prioridades e igualitarios.
Lo son porque todos los esfuerzos, las negociaciones con otras administraciones y los ahorros previstos en gastos innecesarios sirven para mantener servicios públicos con una calidad digna. “Y son responsables porque analizamos, entre nosotros y con todas las entidades sociales, deportivas y asociativas de la ciudad, cada céntimo que gastamos, priorizando en aquello que es necesario y beneficioso para nuestra ciudad y desestimando después que en nada ayudan en nuestra ciudad”.
Además, son unos presupuestos que se han trabajado con una idea básica: la de la IGUALDAD. “Para nosotros tienen el mismo tratamiento los vecinos de una barriada que los de otra; los vecinos que pertenecen a un colectivo determinado o a otro; y también los vecinos que practican un deporte u otro. Hemos repartido el dinero de manera dialogada y participada, porque no tenemos nada que esconder y porque queremos llevar a cabo un reparto justo, equitativo e igualitario entre todos los vecinos».
4.- Son unos presupuestos para reducir deuda.
Por primera vez en muchos años, si se cumplen con estos presupuestos tal y cómo se comprometen con la ciudadanía, aseguran que el gobierno abandonará el Ayuntamiento reduciendo la deuda dejada por el anterior gobierno. Tanto la deuda bancaria como la deuda comercial. Fundamentalmente y primero que nada, la deuda comercial. De hecho, y con la gestión de estos primeros 12 meses, la deuda con proveedores se ha reducido en un 50%. Además, los presupuestos de los próximos años son unas cuentas que dejarán un superávit anual de más de 16 millones de euros, cantidad que en los primeros ejercicios, se destinará a acabar de pagar aquello que se debe de a las pequeñas, medias y también grandes empresas que han trabajado estos últimos cuatro años para el Ayuntamiento de Gandia “y que todavía no han cobrado por la mala gestión del anterior gobierno”.
5.- Son unos presupuestos para pagar y generar economía y trabajo.
Y es que entendemos que pagar por el que se contrata es la mejor manera de generar economía y trabajo en nuestra ciudad. Recuerdan que son muchas las pequeñas y medianas empresas de esta ciudad, y también de esta comarca, que han estado a punto de cerrar sus puertas o, incluso, han tenido que cerrarlas o despedir a personas por no haber cobrado aquello que el Ayuntamiento les debía. “Nosotros hemos puesto punto y final a esta situación, y el Ayuntamiento de Gandia, a lo largo de esta legislatura, será capaz de pagar las facturas dentro de los plazos que marca la ley. Y lo podremos hacer porque no contrataremos cosas que no podamos pagar. Nos ceñiremos a nuestra realidad y trabajaremos con ella, de manera responsable y transparente”.
Para Diana Morant, Gandia merece una oportunidad, todo y la mala situación del ayuntamiento. “A pesar de la crítica situación, meter orden y sentido en las cuentas municipales no significa que continuamos trabajando por la vida de las personas, no es incompatible con la gestión económica. Es mejorar la situación de personas, familias y autónomos. No podemos ni queremos tener una ciudad paralizada y muerta a consecuencia del falso “coste cero” del PP de Torró, Soler, Barber, Gregori y compañía. Creamos en una ciudad que, a pesar de las dificultades, vuelve a levantarse. Una ciudad que, con el esfuerzo de todos, renace para crecer con fuerza y volver a ser esa capital cultural, turística, comercial e industrial que siempre hemos sido. La segunda ciudad más importante de Valencia”.
Responsabilidad compartida
Por su parte, la vicealcaldesa ha asegurado que los presupuestos de 2016 responden al mandato de la ciudadanía de propugnar un cambio en el gobierno de la ciudad para cambiar el rumbo de las políticas de los últimos años “y que nos habían encaminado a la quiebra económica. Son unos presupuestos que venden marcados por una obligación legal, que es el Plan de Ajuste impuesto por el Ministerio de Hacienda”.
Milvaques ha recordado que la comparación de este presupuesto con cualquier anterior es realmente complicada, dado que los anteriores eran presupuestos totalmente irreales e ilegales y que, además, se complementaban con aportaciones desde IPG, “la herramienta perversa de diferir deuda, ocultar cuentas y enchufados y que, en casos como Comunicación o Deportes, los gastos eran desorbitados”.
La situación económica crítica nos obliga a todas y a todos: Ayuntamiento, colectivos y ciudadanía a ajustarnos el cinturón. “Por eso, la responsabilidad y el esfuerzo ha sido compartido. Nosotros, los políticos, hemos sido los primeros al aplicarnos el ahorro y los recortes. Este gobierno es lo más económico de la historia de Gandia, y el coste total de la corporación supone un ahorro de más de 570.000 euros anuales, a pesar de haber vuelto a dotar económicamente y de manera digna a la oposición. Hemos recortado drásticamente en personal de confianza, suprimiendo las contrataciones a dedo y discrecionales que el PP realizaba, tanto desde el Ayuntamiento como desde la empresa pública y otras empresas externas. Hemos reducido también nuestro salario y las asignaciones a los grupos municipales.
Hemos reducido también en partidas que antes estaban extremadamente hinchadas y que servían para hacer propaganda: Comunicación, Protocolo y Alcaldía se reducen en un 60%. Y, sobre todo, hemos soportado el desgaste que tiene para un gobierno tomar decisiones impopulares pero valientes para salvar Gandia”.
A la ciudadanía también le piden un esfuerzo mediante una subida de impuestos. “Por desgracia. Pero los garantizamos que cada céntimo que pagan, irá invertido a mejorar su calidad de vida. Queremos recordar que el anterior gobierno subió también los impuestos más de un 20%. Y a pesar de esto, la deuda se multiplicó por más del doble y se dejó de pagar a empresas y asociaciones. Nosotros, en cambio, hemos vuelto a pagar y hemos reducido deuda en sólo un año. Y hemos aplicado transparencia para que los gandienses sepan en que gastamos cada céntimo que pagan de impuestos. Son los primeros presupuestos del cambio en las formas y las maneras de gobernar”.
Así, partidas como Servicios Básicos al ciudadano, Seguridad Ciudadana, o Bienestar Social, se incrementan. Es un incremento pequeño pero que marca cuáles son las prioridades de este gobierno.
Las cifras
Salvador Gregori ha resaltado que estos son los presupuestos “más trabajados de la historia del Ayuntamiento”, según han indicado los mismos técnicos municipales. Y ha insistido en la doble dificultad a la hora de hacer la comparativa, “por el efecto distorsionador de la empresa pública como centrifugadora de gasto” y, de otra, por la nueva estructura orgánica del Ayuntamiento, que ha variado tanto en cuanto a las áreas, como las competencias. Así, será difícil la comparativa si no es por metadatos: los capítulos del I al V de ingresos y gastos corrientes, donde puede incidir el Ayuntamiento, porque el resto son inversiones, ingresos y gastos financieros, etc…
A primera vista, los ingresos suben un 2’89% (de 72’2 del 2015 a 74’3 millones de € al 2016), mientras que el gasto corriente baja un 8% (de 63,2 a 58’2). “A pesar de que la realidad es mucho más significativa, porque los ingresos corrientes de 2016, al contrario de 2015, no están hinchados. Por ejemplo, con una previsión de ingresos de 10 millones de € en concepto de cobro del canon del agua, a pesar de saber el gobierno del PP que nunca iban a cobrarse. Por lo tanto, quitando esa distorsión, la realidad es que los ingresos aumentan un 19’42% (de 62,2 a 74,3 millones de €).”
De igual manera, el gasto corriente real baja un 19,45% (de 72’2 a 58’2 millones de €), “porque la de 2015 era también tramposa si tenemos en cuenta todo el gasto que se hizo y no estaba reconocida, porque los cajones estaban plenos de facturas impagadas”. El resultado del ahorro de un 19’45% es un superávit de 16’9 millones de €, “que no gastaremos en fiestas, sino para hacer frente al pago de todas las empresas que el PP, después de poner dos vueltas el *contador a cero, dejó colgadas la última legislatura”.
Ingresos
La mayor parte de los ingresos corrientes (43,8 millones) provienen de una subida impositiva que permitirá hacer frente a la deuda comercial y financiero. “Seremos el primer gobierno en mucho tiempo que finalizará la legislatura con una deuda menor al heredado”. Aumentan un 31’9%, respecto al 2015.
Gastos corrientes
En cuanto al gasto corriente y, gracias, a las medidas de austeridad se consigue ahorrar un 40,9% (8’6 millones de €). Todo y el ajuste, se ha priorizado el gasto en partidas sociales que se mantienen o suben como Educación, Bienestar Social (se mantiene, pero la previsión es obtener importantes subvenciones por parte de la Generalitat), Cultura (reducción mínima) o Turismo, que aumenta un 40% (a pesar de que muchas acciones se hacían mediante IPG).
Finalmente, se ha lanzado el mensaje a la ciudadanía que puede tener la seguridad “que este gobierno gestionará su dinero de cara, asegurando que la ciudad no se paraliza y garantizando también la igualdad de todas y todos, independientemente del barrio donde vivan, el colectivo al que pertenecen o el deporte que practican”. Este es el compromiso del ejecutivo en el contrato que firman con la ciudadanía, en forma de presupuestos. “Unos presupuestos para volver la decencia en Gandia y darle una oportunidad”.
Calendario de aprobación de los Presupuestos
1.- Hoy miércoles, 1 de junio, se convoca la Comisión de Políticas Económicas para el próximo martes, 7 de junio. Durante toda la semana, los diferentes grupos de la oposición podrán trabajar el documento y presentar las enmiendas o propuestas de modificación y ampliación que consideran oportunas.
2.- Hoy también se presenta el borrador de presupuestos al Consejo de Participación Ciudadana, convocado con carácter extraordinario y urgente, quien también lo estudiará.
3.- El martes, 7 de junio se presentan las enmiendas a la comisión de economía. Durante toda la semana el gobierno estudiará las propuestas.
4.- Lunes, 13 de junio la Junta de Gobierno Local aprobará el documento que se enviará al Ministerio de Hacienda (que es quien tiene que dar el visto bueno, puesto que el presupuesto está acogido a su Plan de Ajuste impuesto)
5.- A pesar de que no se sabe con certeza cuando llegará la respuesta del Gobierno central, se espera que al Pleno del jueves 14 de julio se puedan aprobar definitivamente los Presupuestos Municipales de Gandia para 2016.