El ex alcalde de Gandia, José Manuel Orengo, ha pedido al gobierno de Torró seis meses para gestionar y solucionar los problemas que Torró no sabe gestionar, como el edificio Innova, la sede de la Universitat de València, la plaza del Tirant o la remodelación del Puerto con un Palacio de Congresos.
Con esta contra oferta, Orengo ha contestado a la propuesta realizada minutos antes por el portavoz del gobierno, Víctor Soler, quien daba 15 días para solucionar la gestión de los locales comerciales situados a la plaza del Tirant, de la que los socialistas lamentan que los miembros del PP no hayan gastado ni un minuto en estos meses de legislatura para dinamizarla.
Orengo ha pedido al gobierno “el mismo tiempo que llevan ellos de legislatura haciendo políticas de enchufados y pandereta” para demostrar que hubieran podido, en este tiempo, solucionar estos problemas de otro modo a como lo han hecho, dado que sólo han paralizado y desestimado lo que se había realizado. Además, el socialista ha pedido que, en caso de no aceptar esta oferta, el gobierno deje de criticar la anterior gestión.
Y es que Orengo ha explicado que Torró “actúa como Atila y destroza todo aquello que viene de la anterior legislatura aunque sea positivo para la ciudad”. Una actitud que para el portavoz socialista demuestra que “Gandia no merece un gobierno como el que tiene”, y vuelve a pedir a los populares más gestión y menos críticas a la oposición.
1,5 millones de euros pagados
Respecto a la plaza del Tirant, Orengo ha lamentado que los populares no hayan gestionado su dinamización en este tiempo y la hayan dejado morir sólo para destrozar otro proyecto emblemático del anterior gobierno. Orengo ha explicado que, por lo visto, el gobierno no se ha enterado de que sí que se había pagado una parte de la obra, concretamente 1,5 millones de euros, y que con ECSA se había firmado un convenio de pago mientras él todavía era alcalde de la ciudad.
Orengo ha finalizado pidiendo más responsabilidad a Torró para gestionar el futuro de la ciudad y la salida de la crisis, con políticas que busquen ingresar recursos desde el Ayuntamiento y no con decisiones de “nuevo rico” en las que Gandia no consigue ningún beneficio.