El portavoz y secretario general del PSPV-PSOE en Gandia, José Manuel Orengo, ha destapado hoy, ante el silencio del gobierno del PP de Torró, que la política de eventos y amiguismos que está llevando a cabo la derecha de Gandia han llevado al Ayuntamiento a la suspensión de pagos “después de ser incapaz de hacer frente a los vencimientos bancarios a fecha de 30 de septiembre”.
Se trata, según ha explicado Orengo, de una de las noticias más graves a nivel económico que puede vivir el Ayuntamiento de Gandia y que “no se había dado nunca antes en la historia de Gandia”. Es por eso que Orengo ya ha advertido al gobierno del PP de Torró y Barber que “no pueden continuar culpando al anterior gobierno porque antes siempre se había pagado en los bancos”. Así pues, el portavoz socialista ha lamentado que el PP “diga que no tiene dinero para cumplir obligaciones pero vivan en una continua fiesta”.
Tal y como ha explicado Orengo, el departamento de Economía y Hacienda dirigido por Guillermo Barber, ejecutó una orden de Torró y retiró todo el dinero que el Ayuntamiento tenía en determinadas entidades bancarias para pasarlos a otra entidad. Curiosamente, aquellos bancos que se quedaron sin dinero eran los que, a fecha de 30 de septiembre, tenían que ingresar vencimientos de créditos, con lo que no pudieron cobrar la deuda y han declarado insolvente al consistorio, embargando así todos los ingresos que puedan llegar para el Ayuntamiento a esas entidades bancarias.
Orengo se ha mostrado “muy preocupado” por la estabilidad financiera del consistorio y decepcionado “porque esta es una situación que provoca la vergüenza de muchos funcionarios de la casa”. Por eso, su anuncio no se ha quedado en la crítica y ha ido más allá proponiendo posibles soluciones que podrían poner punto y final a este problema.
En concreto, Orengo ha hablado de tres posibilidades: negociar la devolución de los 1,5 millones de euros que se han anticipado al propietario de la Citroën, amigo de Torró, “porque aquella no es una infraestructura de extrema necesidad y a día de hoy, meses después de dar el dinero, todavía se venden coches allí”. La segunda solución es que Torró eche de peso político dentro de su partido y negocie con Fabra para que la Generalitat pague a Gandia todo el dinero que le debe. Y por último, el portavoz socialista se ha ofrecido para intermediar con la Diputació de València y pedir un rescate.
Por su parte, la concejala Ana Garcia ha arremetido duramente contra la política del PP de Torró y ha recordado que “son sus gestiones basadas en el amiguismo, su pandereta de eventos varios y los más de 50 enchufados que tienen por toda la casa los que nos han llevado a esta situación límite”. Así, Garcia ha enumerado algunas gestiones como la compra sobrevalorada de una galería comercial en la playa, la compra de la Citroën a un amigo, los conciertos del verano, los toros o el Maremagnum, entre otras.
Políticas que este verano le han costado al Ayuntamiento de Gandia más de 2 millones de euros que ahora ayudarían a no vivir una situación de impagos a los bancos, a los que hay que pagar 3,7 millones de euros de ahora hasta final de año. Por eso, Garcia ha lamentado que “mientras Torró se hacía fotos con Julio Iglesias, Pantoja o Paquirri, el Ayuntamiento no pagaba las letras al banco”.
Gil ha asegurado que esta situación se da porque “Barber es incapaz de resolver problemas porque no tiene experiencia ni capacidad política para contradecir a un Torró que sigue gastando en manos llenas como un nuevo rico”, y ha lamentado que la consecuencia de todas las fiestas y los caprichos de Torró sea “aumentar los impuestos de Gandia más que nunca en toda la historia”.