Coincidiendo con la celebración de un congreso de participación ciudadana y gobierno abierto, el Ayuntamiento de Gandia ha sido condenado por tercera vez en esta legislatura por privar de la información sobre las facturas de IPG el 2012. Esta condena obliga a facilitar las facturas del 2012 en tiempo y forma. El gobierno facilitó la consulta por un periodo de tiempo acotado de dos horas, ante lo cual Vicent Mascarell, concejal del grupo municipal socialista, recurrió porque no daba tiempo material para supervisar en condiciones los más de 1000 documentos contables objeto de fiscalización además de la condena en costas.
Así, el juez del juzgado número 5 de lo Contencioso-Administrativo de Valencia aprecia que «El acto recurrido resultaba contrario a derecho en la medida que introducía una restricción carente de fundamento en el derecho de acceso del recurrente a documentación administrativa de relevancia para el ejercicio de su función».
Para el juez, las escasas horas concedidas para revisar las facturas de IPG «parte de la consideración, ciertamente poco afortunada, del tiempo que requeriría a un profesional de la contabilidad el examen de ese volumen de documentación sobre la base de técnicas de muestreo estadístico y aquí no nos encontramos ante el ejercicio de profesión de auditoría por parte de un técnico en la materia, sino ante el derecho fundamental de quien ocupa un cargo público de poder controlar la actividad de los Ayuntamientos para cuyo gobierno y administración ha sido elegido».
El juez incide en que el Ayuntamiento no ha aportado «el menor elemento de juicio que justifique las restricciones temporales introducidas por el acto administrativo sin que se haya acreditado ninguna circunstancia que viniera a aconsejar la limitación horaria de la consulta, lo que ya de por sí supondría la contrariedad a derecho de la decisión adoptada».
Para Liduvina Gil “Esta nueva condena por dificultar el acceso legítimo a la información a un representante público coincide casualmente con la celebración de un congreso sobre participación y gobierno abierto, es decir, “dime de lo que presumes y te diré de lo que careces”. En todo caso, esperamos que saquen algunas enseñanzas del congreso, aunque dudamos que las apliquen porque dependen de una voluntad por la participación política y la transparencia que nunca han demostrado; como la justicia ha evidenciado por tercera vez”.