Quiénes somos

La Agrupación Socialista de Gandia se fundó en 1907 alrededor de la movilización del Primero de Mayo, partiendo de algunos trabajadores asociados al Centro Obrero de la calle Santa Clara 19. Era la primera vez que se celebraba el Día Internacional del Trabajo en la ciudad, con una jornada festiva que concluyó con un mitin en el Centro Obrero Socialista (ubicado entonces en el número quince de la calle de Alcoy, actualmente calle Magistrado Català), el cual fue la primera sede del partido.

El protagonismo inicial del socialismo gandiense correspondió a las sociedades de estibadores del puerto y a la de obreros, que acababan de federarse a la Unión General de Trabajadores (UGT). Después se asociarían maquinistas, fogoneros, forjadores, carpinteros, panaderos, ferroviarios y dependientes. De aquí salieron los primeros socialistas locales, como José Moreno, tendero de la calle Mayor, y Bernardino Pérez, trabajador del ferrocarril, los cuales fundaron la Agrupación Socialista de Gandia.
En junio de 1911 se crearon en Gandia las Juventudes Socialistas. Este movimiento incipiente se truncó el septiembre siguiente cuando, con el pretexto de una huelga general, fue clausurado el Centro Obrero y disueltas la Agrupación y las Juventudes por disposición del gobernador civil. La Agrupación fue autorizada a reconstituirse el agosto de 1912 y las Juventudes se reconstruyeron un año después de la mano de Salvador Gras.
A partir de 1912, la Agrupación de Gandia tuvo que hacer frente a una intensa campaña de propaganda antisocialista que, desde el Centro de Acción Social, entidad promovida por un grupo de patricios gandienses vinculados al movimiento social de la Iglesia, se llevaba adelante por todas partes de la ciudad. Por lo tanto, la estrategia a través de la cual se pretendía contrarrestar la acción propagandística del Centro de Acción Social se encontrará con numerosas trabas.
Incluso, sobre 1917 tan solo la Sociedad de Profesiones y Oficios Diversos continuaba con su tarea sindical, puesto que el resto de organizaciones se habían disuelto. Además, no podemos dejar de lado la crisis agraria y comercial que se originó el 1917 por el bloqueo de los puertos valencianos por la armada alemana. Nos encontramos en el contexto de la Primera Guerra Mundial, la cual determinará la paralización de las exportaciones, el paro y el hambre.
En enero de 1920, a pesar de que todavía se sufrían las consecuencias de la crisis, la Agrupación Socialista de Gandia organizó el VII Congreso de la Federación Socialista Levantina.
La dictadura de Primo de Rivera, aunque aparentemente parece una paradoja, empezó una coyuntura basta favorable por la organización del movimiento obrero a Gandia. De esta manera, en 1927 encontramos ocho sociedades obreras legalmente constituidas en la ciudad, mayoritariamente organizadas al margen de las centrales sindicales de la época. A pesar de que con el paso del tiempo, se decantarán para integrarse o bien en la UGT o bien en el sindicato de tradición anarcosindicalista de la Confederación Nacional de Trabajadores (CNT).
En septiembre de 1927, los socialistas de Gandia y, particularmente, su presidente, José Bernabeu, vieron como un viejo sueño, que se remontaba a sus orígenes como organización, se hacía realidad. Nos referimos a la aparición del periódico ‘El Popular’, órgano de expresión de la Agrupación de Gandia. Con una periodicidad quincenal, se subtitulará como «el defensor de las sociedades obreras y los intereses del distrito». Su precio era de diez céntimos, y su redacción se ubicó en el número once de la calle Padre Gomar, en los locales del Centro Obrero Socialista.

En enero de 1930, por la influencia del Partido Socialista de Gandia, el conjunto de las sociedades obreras de la ciudad decidieron federarse y superar así, definitivamente, las diferencias que hacían del obrerismo gandiense, un movimiento disperso y sin cohesión. La Federación de Sociedades Obreras de Gandia compartirá su sede con la Agrupación Socialista, configurándose así la Casa del Pueblo, que se ubicará en la calle de la Vilanova.
Durante el primer tercio del siglo XX, la Agrupación Socialista de Gandia, a pesar de las numerosas trabas y la hostilidad de una sociedad intensamente católica y conservadora y la problemática que derivaba de una militancia muy reducida y de la carencia de liquidez económica, conseguirá consolidarse.
Al proclamarse la II República el 14 de abril de 1931, los socialistas gandienses compartieron el poder municipal con los republicanos blasquistas. El PSOE participó en el Gobierno español, en el cual Largo Caballero ocupó el Ministerio de Trabajo y en muchos ayuntamientos, como el de Gandia, los socialistas estuvieron representados. La Segunda República unió a los republicanos y a los socialistas, siendo durante este periodo cuando la fecha del Primero de Mayo logró un impulso importante, coincidiendo con la consolidación de la organización obrera a Gandia.
En enero de 1933 se constituyó el Subcomité del Distrito de Gandia, como un paso más en el intento de estructurar y perfeccionar la organización de la Federación Socialista Valenciana, siendo delegado del distrito José Bernabeu, quién empezó una campaña de divulgación de los ideales socialistas por la comarca de la Safor.
El año 1935, una crisis política y económica amenazaba a los trabajadores. Ante la situación que estaba atravesando la clase obrera, el socialista José Bernabeu pronunció en la conmemoración del cumpleaños de la proclamación de la II República un discurso emitido por Radio Gandia, donde afirmó que se tenía que recuperar el espíritu del 14 de abril, tal como después se consiguió con la formación del Frente Popular.
En las elecciones de 1936 ganó el Frente Popular, una coalición política formada por partidos republicanos y las fuerzas de la izquierda. El 23 de febrero se constituyó en el Ayuntamiento de Gandia una Comisión Gestora, de la cual formó parte el PSOE con varios regidores.
Durante la Guerra Civil (1936-1939), el socialismo gandiense vivió un protagonismo hasta entonces inédito en la historia de la ciudad. Si bien en el primer bienio republicano los socialistas habían entrado a formar parte por primera vez del Gobierno local, no será hasta después del golpe militar del 18 de julio de 1936 cuando asumirán las máximas responsabilidades en la Corporación municipal, siendo nombrados alcaldes tres miembros destacados del Partido Socialista: Benjamín Bravo, Francisco Julio y José Tarrasó.
A partir del 1 de abril de 1939, con el fin de la Guerra Civil, los socialistas vivieron una larga posguerra, la «larga noche» del franquismo. Una época de vencidos y vencedores donde los partidos políticos de izquierdas se vieron obligados a exiliarse o pasar a la clandestinidad. Así, el socialismo gandiense desapareció entre fusilamientos, prisión y exilio.

Con la recuperación de la democracia y los inicios de la Transición, en 1977 se refunda la Agrupación Socialista de Gandia. Desde el primer ayuntamiento democrático constituido en 1979 hasta la actualidad, la ciudad ha contado con cinco alcaldías socialistas: Salvador Moragues (1983-1991), Pepa Frau (1991-2003), José Manuel Orengo (2003-2011), Diana Morant (2015-2021) y José Manuel Prieto (desde 2021). Han sido casi cuarenta de gobiernos locales liderados por socialistas en los que Gandia ha experimentado su mayor transformación, convirtiéndose en la gran ciudad moderna, dinámica y amable que es hoy.


El PSPV-PSOE de Gandia siempre ha tenido claro un modelo de ciudad compartido con toda la ciudadanía; siempre ha trabajado para hacer de Gandia un lugar de convivencia y de cohesión social y territorial; siempre ha apostado por el bienestar, la justicia social y la igualdad de oportunidades. Para conseguirlo, han luchado todas las generaciones de socialistas en la ciudad durante más de cien años. Y continuarán haciéndolo en el futuro porque este es el sentido de su existencia como partido.

La contribución de los socialistas a la historia reciente de la ciudad y al bienestar de su gente todavía está en marcha y, lo estará siempre presente, mientras haya desigualdades en nuestra sociedad. Hoy, Gandia está gobernada democráticamente por una socialista y esto significa progreso, crecimiento sostenible y políticas sociales: la herencia continúa materializándose.