El concejal del Grupo Municipal Socialista en el Ayuntamiento de Gandia, Vicent Mascarell, ha criticado hoy en rueda de prensa que sólo ocho meses después de las elecciones, Torró ya ha roto sus dos principales promesas electorales: la apuesta por la ocupación y el mantenimiento de los impuestos. Un aumento de los precios públicos que para Macsarell “sirve para pagar los caprichos de Torró y su política de acontecimientos”.
Estas declaraciones vienen motivadas por dos noticias: un nuevo aumento del paro en Gandia, que supera ya las 9.000 personas sin trabajo (9.152) y el anuncio realizado el pasado lunes por el gobierno del PP en la ciudad que decía que van a subir los precios de los servicios públicos de la ciudad para evitar su déficit. Una medida que, para los socialistas, es un nuevo abuso de la política del PP que finalmente subirá impuestos y subirá precios públicos.
El concejal socialista le ha recordado a Torró la definición de servicio público, explicando que es “el conjunto de prestaciones reservadas en cada estado a la órbita de las administraciones públicas y que tienen como finalidad la cobertura de determinadas prestaciones”, y ha puesto especial atención a un dato: los servicios públicos “los brindan determinadas entidades para satisfacer las necesidades de una comunidad y no siguen criterios de rentabilidad”.
Para Mascarell, no se puede permitir que Torró “acepte como normal el déficit de conciertos, playas artificiales, compras de centros comerciales, concesionarios de coches y otros acontecimientos que está programando y critique el de actividades culturales y de salud” así como lo del transporte público, utilizado por más de 800.000 personas cada año.
Mascarell ha explicado que con el dinero de la compra de la Citroën se cubriría el déficit del transporte público del Urbà. Además, el concejal socialista ha retado al gobierno de Torró a que demuestre datos de alguna cuyo ciudad el transporte público no sea deficitario. También ha pedido al gobierno conocer el coste del Urbanet, del que ha dicho que “estamos de acuerdo en que es necesario pero más deficitario que l’Urbà”.
Mascarell asegura que estas decisiones son “un paso atrás en la calidad de vida de los gandienses”, dado que con la situación económica que se vive y el aumento de la presión fiscal, subir los precios de actividades de este tipo y de servicios públicos como educación o transporte “ahogará más todavía a muchas familias de la ciudad”.
Los socialistas han tendido la mano al gobierno para que, si es necesario hacer un esfuerzo en los precios públicos, hacerlo, “pero de forma consensuada entre todos los grupos políticos y buscando que no lo pagan aquellas familias que más ayuda necesitan”. Por último, Mascarell ha dicho que los socialistas “seguiremos luchando para conservar el modelo de ciudad”.