Los socialistas afirman que la expropiación de la Citroën es una compraventa maquillada

El concejal del Grupo Municipal Socialista en el Ayuntamiento de Gandia, Vicent Mascarell, ha denunciado hoy la oscuridad y el secretismo con el que Arturo Torró firmó ayer el convenio de expropiación con los propietarios del edificio de la Citroën. Una falta de transparencia que para los socialistas confirma lo que venían diciendo: que se trata de una compraventa maquillada en forma de expropiación.

Mascarell ha lamentado que, una vez más, los miembros de la oposición se enteran de una importante operación inmobiliaria a través de los medios de comunicación, y ha asegurado que tiene la constancia de que esta compraventa ha sido impulsada por el propio Torró y pactada con los propietarios del inmueble antes de las elecciones del mes de mayo.

“Sólo así se explica que Torró rechace otros emplazamientos para el retén policial, incluso un terreno municipal ubicado a escasos metros”, ha dicho Mascarell, quien ha añadido que “a Torró le da exactamente igual donde ubicar el retén, lo que no le da igual es a quién le compra el local”.

Alrededor de las informaciones aparecidas hoy en los medios de comunicación, Mascarell ha comentado con ironía que “es la primera vez que vemos tanta alegría por parte de los expropiados en una expropiación forzosa y, más todavía, teniendo en cuenta que se trata de una actividad comercial en uso”. El concejal socialista ha explicado que estos procesos habitualmente son más dramáticos y difíciles de digerir por parte de los propietarios.

Por todo esto, Mascarell ha anunciado que el GMS solicitará por escrito conocer el expediente de expropiación para poder saber así las contraprestaciones que tendrá que pagar Gandia con el dinero de los impuestos de los ciudadanos para pagar, en tiempos de crisis y con el argumento de que no hay dinero para muchas cosas, una operación capricho de Torró.