El historial de adjudicaciones y operaciones oscuras y sospechosas de trampa por parte de Arturo Torró continúan aumentando. Hoy el PSPV-PSOE de Gandia ha denunciado la última, que tuvo lugar ayer durante la comisión de Urbanismo y que consiste en la adjudicación al colegio británico de Xàtiva del solar y el edificio del CSI-COM de Gandia. Un regalo interesado de Torró para la empresa del colegio donde estudian familiares suyos.
En la misma línea en la que los socialistas se han estado pronunciando respecto a este proyecto desde su anuncio ha comparecido hoy la concejala Liduvina Gil, que ha insistido en denunciar que la operación supone que Gandia “le regala a la empresa Promocionas Educativas Xàtiva SL un solar y un edificio de propiedad municipal para que lo explote y obtenga beneficios”.
Y es que tal y como ha denunciado hoy Gil, la adjudicación está rellena de aspectos oscuros y tramposos, la marca del gobierno del PP de Torró, en un concurso “que se ha hecho ad hoc para que sea esta empresa y no otra la que finalmente obtenga la adjudicación”. Así, entre otras cosas, Gil ha criticado que el gobierno no ha dejado consultar a la oposición los informes técnicos del proyecto, tal y como se pidió en la mesa de contratación, ni tampoco han recibido respuesta a la solicitud de una autorización de la Conselleria de Educación para ubicar allí este colegio internacional, papel del cual el gobierno asegura no tener constancia.
El tercer aspecto que motivó el voto contrario de los socialistas durante la comisión de ayer es el hecho de que la adjudicación llega sin haberse hecho la pertinente modificación de la Ordenación Estructural del Plan General para cambiar a uso educativo la parcela donde hasta ahora se encontraba el CSI-COM, medida que tiene que pasar por pleno. Los socialistas pidieron por este motivo que la adjudicación quedara sobre la mesa, pero el PP hizo uso de su mayoría para aprobar la adjudicación y anunciar que la modificación se hará más adelante.
Desde la vertiente más política, Gil ha criticado que esta gestión de Torró “haya supuesto la ruptura de la cohesión educativa que había hasta ahora en Gandia”. Porque, tal y como ha explicado, durante muchos años ha existido un entente amable entre los diferentes centros educativos de la ciudad, y las decisiones o cambios que se han realizado llegaron con consenso, no como en este caso, donde los socialistas tienen constancia de la oposición de otros centros privados de la ciudad.
En este sentido, Gil ha detallado que la adjudicación del edificio “supone una competencia desleal de este nuevo colegio hacia otros centros privados de la ciudad que han invertido su capital en la compra de un solar y la construcción de un edificio”, algo que no hará esta empresa de Xàtiva, que acuerda la concesión del espacio durante 50 años prorrogables hasta 75 años a cambio de un canon de 140.000 euros anuales. Situación parecida a la que se da en Xàtiva, donde el consistorio ha acabado perdonando esta cantidad. Además, el 30% del canon (unos 44.000 euros) los podrá pagar la empresa con unas becas el coste de las cuales no ha sido detallado pero que serían un total de 10 becas de verano y otras 10 becas para el resto del curso, cantidad “ridícula” para todas las becas que se podrían pagar con este dinero, ha explicado Gil.