Como cada lunes después de Junta de Gobierno Local, las coportavoces del ejecutivo, Alícia Izquierdo y Balbina Sendra, han comparecido ante los medios de comunicación para hacer balance de los principales acuerdos adoptados. Pero antes, y a preguntas de los periodistas, han valorado el hecho que la Generalitat Valenciana haya excluido, por segundo año consecutivo, la restauración del campanario de la Colegiata de “las ayudas destinadas a financiar actuaciones a promover la protección, el fomento y el desarrollo del patrimonio y la dinamización cultural, y la adecuación y la renovación de bienes y espacios municipales de la Comunitat Valenciana, convocadas por la Resolución de 12 de diciembre de 2024, de la Presidencia de la Generalitat”. Esto, a pesar de que el Consell se había comprometido.
Izquierdo ha recordado que el anterior Govern del Botànic había garantizado una aportación total de 300.000 euros por parte de la Generalitat, en coordinación con la Diputación de València (que ya ha hecho su aportación de 150.000 euros) y el Ayuntamiento de Gandia. A estas alturas, de la administración autonómica solo se ha hecho efectivo el primer pago de 150.000 euros durante la anterior legislatura, pero nada se sabe de la segunda parte, prometida también por el actual presidente Carlos Mazón durante su visita a las obras el 5 de abril de 2024, pero ese año mismo se negó la subvención.
Un año después la directora general de Patrimonio de la Generalitat, Marta Alonso, volvió a prometer que llegarían el dinero pendiente, durante la visita a las obras el 5 de abril pasado acompañada de concejales del PP de Gandia. Y el pasado jueves se hizo pública la resolución de ayudas de este año que excluye, por segunda vez, el proyecto de restauración. También la Fundación de la Colegiata se vio excluida de una subvención, en este caso de Patrimonio Cultural.
Como resultado Gandia ha tenido que hacer frente a dos terceras partes del coste, su parte y la de la Generalitat. A pesar de este incumplimiento, las obras han continuado gracias al esfuerzo del Ayuntamiento de Gandia, que ya ha invertido más de 524.000 euros para garantizar la totalidad del proyecto, incluyendo redacción, ejecución y mejoras en la decoración pictórica deteriorada del campanario.