Arturo Torró deberá cumplir forzosamente con la medida cautelar decretada por el juez de lo Contencioso Administrativo por la retirada de la dedicación parcial al concejal del grupo municipal socialista Joan Lluís Soler. El alcalde hizo caso omiso a la resolución judicial que obliga restituir la dedicación parcial a Soler hasta que se juzgue el caso. La resolución es firme ya que, al contrario a lo anunciado por el gobierno en su día, no se interpurso recurso contra la medida.
El concejal Vicent Mascarell, que lleva la defensa de su compañero de grupo municipal en calidad de letrado, ha afirmado que “Torró traslada a la vida pública la rebeldía judicial que practica en el ámbito privado y empresarial”. En diciembre deberá responder a las preguntas del tribunal por abuso de derecho, desviación de poder y fraude de ley. Hasta entonces, debe devolver la dedicación parcial que retiró a Joan-Lluís Soler para garantizar el derecho fundamental de ejercicio de cargo público en igualdad de condiciones. Vicent Mascarell ha advertido que “si hacen caso omiso al juez del Contencioso-Administrativo acudiremos a la vía penal”.
Torró retiró la dedicación parcial a consecuencia de la denuncia formulada por el grupo municipal socialista sobre la vivienda del alcalde, propiedad del beneficiario de la compra del solar municipal donde se encuentra el McDonalds. Un piso, al mismo tiempo, decorado por la misma empresa adjudicataria de los juegos alegóricos del Prado.