El pasado 21 de enero se declaraba desierto el concurso para la licitación de siete vehículos para la policia local al no presentarse ninguna oferta. A pesar de la crisis, ningún concesionario quiso participar de un concurso de 160.000 euros destinados al servicio integral de los coches que incluye compra y servicio integral de mantenimiento.
El escaso atractivo de la oferta del Ayuntamiento de Gandia contrasta con la generosidad mostrada en la compra del antiguo concesionario de Citroën, donde se gastaron 3,5 millones de euros con la excusa de un nuevo rehén de policia que sigue vacío. De hecho, las únicas actuaciones realizadas hasta la fecha son la instalación de unos carteles informativos sobre la futura instalación.
Para Vicent Mascarell: “La falta de previsión y organización del gobierno del PP deja sin coches nuevos a la policia local con las consecuencias que puede conllevar en su servicio al ciudadano” e indica la paradoja que supone “gastar 3,5 millones de euros al principio de la legislatura en un edificio que permanece vacio, por lo que no supone ningún beneficio para el ciudadano y la policía, mientras racanea unos centenares de euros en la compra de vehículos”.